jueves, 30 de junio de 2011

En el número 2 del Boletín Informativo de la Universidad Atónoma Metropolitana-Unidad Iztapalapa (correspondiente al mes de julio) aparece una nota sobre el ciclo Pseudociencias bajo la lupa.



El boletín completo puede verse aquí.

lunes, 13 de junio de 2011

Pseudotecnología: detectores moleculares, pulseras biomagnéticas y otras chácharas...

En el número más reciente del semanario de la uam (el 41 y que apareció el día de hoy) aparece una nota (con algunas imprecisiones) sobre las conferencias de Andrés Tonini y Daniel Zepeda dentro del ciclo Pseudociencias bajo la lupa.



El número completo puede verse aquí.

sábado, 11 de junio de 2011

Fantasías ufológicas de ayer y hoy presentan...

Publicamos a continuación un interesantísimo texto del todólogo Dañel Muñiz. Como seguramente sabe el lector, Muñiz lleva años estudiando todos y cada uno de los misterios que la ciencia oficial mira con asco y desprecio. Y no exageramos en considerar que es experto en todos los misterios, Muñiz constantemente aparece en programas de televisión (como ¡Qué rica está la sobremesa!) divulgando sus bobadas, perdón, sus conocimientos; habla de niños índigo, conspiraciones, extraterrestres, estigmatizados, milagros de todos colores y sabores, reencarnación, dioses que encarnan, etc. A Muñiz -como buen promotor de patrañas pseudocientíficas, digo, como buen estudioso- nada se le escapa. Ejemplo de esto último es su siguiente nota; sin más rollos dejemos que nos ilumine con sus sabias palabras.


¿CONTACTARON LOS MAYAS CON LOS HABITANTES DEL PLANETA UMMO?
Dañel Muñiz

Hace algún tiempo el conocido detractor Luis Ruiz Noguez publicó en su Marcianitos Verdes dos entradas sobre el "astronauta de Palenque" (ver aquí y aquí). En éstas asume la respuesta de la ciencia oficial sobre la famosa lápida, algunos elementos de la nave extraterrestre son interpretados como un dios de la tierra, un árbol de la vida y un quetzal.

En sus dos entadas el tal Noguez pretende enmendarle la plana a estudiosos como Erich Von Däniken, pero ¿en qué falla Noguez?

Es verdad que en la lápida no aparece una representación de una nave similar a las que se usaron para llegar a la Luna, es decir, un cohete; pero eso no significa que no aparezca la representación de una nave extraterrestre. Afirmo lo siguiente: la lápida de palenque muesta una representación de una nave para viajar por el espacio.

¿Recuerda los programas de debate sobre OVNIs que organizaba Nino Canún? Pues uno de los invitados era el exotecnólogo Max Hofbauer. ¿Que qué diablos es la exotecnología? Es el estudio de la tecnología de los hermanos del cósmos.

Hofbauer hizo un descubrimiento importantísimo. Dicho descubrimiento echa por tierra lo expuesto por Ruiz Noguez en su blog.

En el número siete de la revista Contacto Ovni aparece un artículo sobre este tema, el artículo es de Armando Nicolau. Veamos lo que informa:


¿UN PLATO VOLANTE EN LA TUMBA DE PALENQUE?

Hacia 1991, mi amigo y compañero de investigaciones sobre el fenómenos OVNI y su INFLUENCIA en la Tecnología de Antiguas Culturas, Max Hofbauer, descubrió que sí existe la posibilidad real de interpretar un plato volante en la sepultura de Palenque.

Accidentalmente, observó el reflejo de una fotografía de la loza de Pakal reflejada en un espejo y se percató que en realidad, esta imagen es una parte simétrica de un esquema simplificado en forma artística, de una nave.

Al observar el croquis interpretado por M. Hofbauer, la imagen nos resulta mucho más clara que la proporcionada por otros investigadores que tan sólo se habían limitado a ver un simple vehículo de navegación aérea con propulsión a chorro, demasiado terrestre, y no un auténtico OVNI que, evidentemente, emplea sistemas de energía muy diferentes, probablemente similares a los que reporta Antonio Ribera en las naves procedentes del planeta UMMO (ver croquis comparativo ente ambos objetos). La "hipótesis Hofbauer" nos trae nueva luz en el campo astroarqueológico y arqueonáutico.



Coincido con las palabras que usa Nicolau para terminar su texto:

El mensaje es muy claro para quien lo quiera ver y entender, el contacto entre extraterrestres y la civilización maya, en la actualidad, es poco menos que innegable. ¿No lo cree Usted?

Una imagen dice más que mil palabras. Observe el lector las imágenes que acompañan esta entrada y diga si no el grabado del rey Pakal corresponde a una nave de UMMO.




Pero me equivocaría si pensara que todo está dicho. Las grandes ideas y respuestas traen más preguntas para ser investigadas.

¿Por qué los ummitas dijeron en algunos de sus documentos que habían llegado a la Tierra en 1950?, ¿por qué los ummitas no hablaron de su contacto con los mayas?, podrían haberle informado a Fernando Sesma o a cualquier otro de sus corresponsales. ¿Qué dirá sobre esto Jordán Peña?, ¿se adjudicará también la lápida de Palenque?

Por otro lado, habrá que hacer una nueva interpretación de cada uno de los elementos de la lápida compárandolos con el esquema de una OAWOLEA UEWA OEMM (nave ummita, para el lector desinformado). Es decir, el trabajo apenas está por comenzar; y los descubrimientos que se hagan sin duda contribuirán al desarrolo de nuestra tecnología, imagine el lector todas las aplicaciones prácticas que podrán obtenerse al estudiar la lápida de palenque a la luz de la hipótesis Hofbauer... el viaje interestelar estará, al fin, a nuestro alcance.

Termino con unas palabras para Luis Ruiz Noguez. Señor Luis, usted como detractor conoce bastante bien el tema, así que con toda seguridad tuvo en sus manos el número 7 de Contacto Ovni, ¿por qué en las entradas de su blog no menciona la "hipótesis Hofbauer"? Daré mi respuesta: no lo hace porque sabe que esa hipótesis demuestra sin lugar a dudas el contacto entre mayas y ummitas, no lo hace porque es imposible refutar al exotecnólogo, estamos ante una evidencia innegable.



En esta última imagen podemos observar a dos mayas/ummitas reparando una de sus naves

lunes, 6 de junio de 2011

En el más reciente número (el 40) del semanario de la uam, Órgano informativo dela Universidad Autónoma Metropolitana aparecen dos notas sobre el ciclo Pseudociencias bajo la lupa. Las notas se refieren a las ponencias de Mario Méndez Acosta, Martín Bonfil y del Dr. Augusto Bondani (para ver en grande sólo dele click).

sábado, 4 de junio de 2011

Pues me encuentro con que la revista Planetas Prohibidos ha publicado su segundo número. Y resulta que publican un relato mio: El mejor programador. Los protagonistas son Marvin Minsky y Dios. Lo ilustra Juan Raffo.

Mire la portada, ¿no se le antoja leerlo? Hay artículos, relatos, cómics, reseñas... Sólo tiene que dar click aquí.

Claro que le recomiendo ir directamente a la página 75, ya después lee lo demás.

El final...

Aunque ya cancelé mi cuenta de twitter (descubrí que mi religión me prohibe el uso de redes sociales), mis informantes (que están infiltrados en todas partes) consiguieron la siguiente imágen que tomó Andrés Tonini al término de la conferencia de Jorge Armando Romo. Así que será considerada la fotografía oficial del cierre del ciclo "Pseudociencias bajo la lupa".

Desde aquí quiero agradecer a todos los ponentes por su participación. Para mi fue una gran experiencia. Espero que ustedes también hayan disfrutado de este ciclo y que pronto nos veamos en otras actividades. ¡Gracias y hasta pronto!




Jorge Armando, El detractor, Kumku, Adán Lerma y Tonini

Esas medicinas alternativas...

Ponencia de Mario Méndez Acosta en la mesa "Productos milagro y medicinas alternativas, ¿funcionan?" dentro del ciclo de conferencias "Pseudociencias bajo la lupa"


Las trampas de la pseudociencia
MARIO MENDEZ ACOSTA

A lo largo de los siglos la charlatanería médica ha fascinado al ser humano, ello se debe a que toda persona normalmente experimenta una gran desazón al enfrentarse a los malestares físicos. El sufrimiento causado por las enfermedades hace rebasar con facilidad las consideraciones derivadas de la razón y la prudencia y obliga a buscar alivio inmediato. No tanto a la enfermedad en sí, sino a la congoja personal que despierta el mal corporal, ya sea el propio o el de las personas queridas.

Este alivio debe ser inmediato, económico, indoloro y de ser posible, de buen sabor.

Tal es el factor fundamental del inocultable éxito y prevalencia de las pseudociencias médicas, así como de gran parte de las prácticas de las medicinas tradicionales de cada región del mundo, aún las más irracionales y manifiestamente mágicas.

De hecho, el primer problema con que nos enfrentamos es que el desempeño de, por ejemplo, los remedios milagrosos que tanto han ocupado la atención pública los últimos meses, se tiende a ponderar con base en el número de testimonios favorables (auténticos o no) que se dan a conocer al público en los comerciales que los promueven pero nunca a través de los criterios de efectividad que emplea la medicina científica, los que se apoyan en estudios estadísticos controlados, que abarcan tanto a grupos de prueba como de control con los suficientes sujetos como para apreciar de manera significativa la efectividad de una droga o tratamiento.

Los testimonios que respaldan la efectividad de una pseudociencia se equiparan así con los que se ofrecen a los retablos o exvotos populares, que se pueden apreciar en las iglesias, Son igual de convincentes y hasta conmovedores pero nunca incluyen información sobre el fracaso ocasional de la intervención divina. En el caso de los anuncios de TV, jamás se considera ninguna falla del medicamento milagroso que se promueve. No existen los ex-- votos negativos al igual que jamás se presentan en televisión testimonios críticos sobre esos productos mágicos.

El testimonio favorable resulta fascinante para el televidente y su atractivo es la clave del éxito y la subsistencia a largo plazo de la pseudociencia médica. Sin embargo, para que ésta se sostenga con un flujo mínimo aunque constante de testimonios reales, basta con que el producto maravilloso que se promueve funcione efectivamente como un placebo, es decir un producto cuyo consumo sea capaz de lograr mejoras apreciables en ese segmento de la población para quienes la mera sugestión resulta suficiente para que experimenten un alivio en la forma en que se sienten, aunque ello sea algo pasajero.

Algunas pseudociencias resultan atractivas ya que materializan una supuesta rebelión exitosa ante el establishment médico, es decir ante esa pretendida dictadura o dominio arbitrario que aseguran los fieles ejercen la medicina científica y los laboratorios médicos en el ámbito mundial de la salud.

Los proponentes de disciplinas como la herbolaria, la quiropráctica, la homeopatía, la osteopatía y muchas otras, gustan de denunciar la existencia de un status quo injusto y abusivo que les impide florecer y les niega el reconocimiento y la igualdad ante la medicina científica a la vista de las poblaciones afectadas por diversos males en la sociedad contemporánea.

El hecho es que en realidad no existe tal establishment o “poder invisible” que les impida a los charlatanes actuar en igualdad de condiciones. Bastaría con que cada una de esas disciplinas sometiera a sus productos, servicios o teorías fundamentales a las mismas pruebas controladas de doble ciego que aplica la medicina a sus propias propuestas, y que mostraran resultados positivos, claros y reproducibles, Con ello, sus remedios serán aceptables en todos los casos. Desde luego que existe reticencia entre los proponentes de las pseudociencias a someterse a estas pruebas ya que, además de que no desean poner en riesgo alguna revelación cuasi divina o dogma de sus creadores originales, están conscientes de que se benefician de una aceptación clientelar fija, la cual sólo se vería mermada si se diera a conocer que no pasaron esas pruebas.

Otro elemento que contribuye al atractivo de las pseudociencias es esa tan divulgada falacia de que ofrecen una especialización individualizada del tratamiento de las enfermedades. Se les dice: “Tú eres especial pero la medicina científica sólo te trata como una mera cifra”.

En efecto, muchas pseudociencias médicas argumentan como algo positivo que sus terapeutas no tratan a la enfermedad sino al paciente, y que cada uno de ellos es diferente y requiere un trato especial, ¡obviamente una trampa para halagar el ego del cliente!

Con esto condenan implícitamente a la medicina científica, por tratar al universo de sus pacientes como constituido por meras estadísticas anónimas. Pero lo cierto es que claramente hay multitud de médicos reales que conviven con sus pacientes y conocen sus idiosincrasias. Por otro lado, la identificación de las verdaderas causas de las enfermedades es el mayor mérito de la medicina científica moderna. Esto le permite prevenir y tratar a grandes núcleos de la población en todas las partes del mundo y fabricar medicamentos y vacunas en masa lo que le ha permitido erradicar males como la viruela y en buena parte la poliomielitis.

Ciertamente, la habilidad del médico en el trato con el paciente influye en la reacción inicial de éste la que se transforma en el amenguamiento de muchos síntomas desagradables y malestares psicosomáticos, algo que aprovechan con destreza los curanderos y los terapeutas de las llamadas medicinas alternativas.

El contacto humano y hasta el mero trato con el médico tiene efectos notables en el paciente desesperado, y desencadena procesos internos que en muchos casos llevan a la eliminación de bastantes malestares leves y pasajeros.

Todo este conjunto de factores se traduce en una vulnerabilidad anímica para el paciente común y corriente, y lo hace fácil víctima de una campaña vigorosa de promoción de productos como los llamados medicamentos milagrosos, que sorprenden su buena fe y los despojan de millones de pesos cada año, contradiciendo así de paso el mito de que la medicina alterna es más económica que la científica.

Los méritos residuales que pueden tener algunos productos que se comercializan en los infomerciales que se transmiten cada día por la televisión, como son por ejemplo el cardo mariano, el licopeno, el resveratrol, el extracto de semilla de uva y varios otros, no justifican ni remotamente el precio estratosférico con que se expenden al público, una población por completo desamparada por las autoridades de salud, que han encasillado a estos productos como suplementos alimenticios ubicados más allá del bien y del mal.

Los efectos nocivos que ocasionan estos productos no son publicitados, como ocurre en el caso de los extractos de toronja o de alcachofa, ya que algunos estudios han demostrado que pueden causar daños al organismo.

Hay otro factor que contribuye al atractivo de la pseudociencia y es el encanto de índole folclórico que poseen las medicinas tradicionales; es decir, las que desarrollan los pueblos a lo largo de los siglos.

No existe ningún mérito en esto. Son escasas las ventajas intrínsecas reales de las medicinas tradicionales, las que en general están afectadas negativamente por el pensamiento mágico, como ocurre con remedios como los ojos de venado, los testículos de tigre, los cuernos de rinoceronte y muchos otros productos, cuya supuesta efectividad sólo se puede atribuir a una idea mágica.

Los seguidores de estas terapéuticas se sienten no obstante partícipes de un movimiento reivindicador o cuasi revolucionario, que supuestamente arrebata el control de la salud y la medicina de manos de una élite monopólica y explotadora, pero los resultados globales no son otros que el retorno a una época de barbarie y de futilidad médica, daños a la salud y extinción de especies animales protegidas.

Las instituciones como la Universidad de Chapingo, que deciden dedicarse a la promoción de la herbolaria sin tener una escuela de medicina, sólo alcanzarían algún mérito si enfocasen sus investigaciones al aislamiento de los ingredientes activos de las hierbas o productos animales reputados como medicinales; en su prueba clínica y en el perfeccionamiento de su posología --es decir su dosificación--, pero sobre todo, si en efecto se animan a desechar productos nocivos que requieren retirarse cuanto antes del mercado.

viernes, 3 de junio de 2011

Recordando al...

También tuve la fortuna de que cayera en mis manos el Gallito Comics (historietismo, rock, cine, arte y cultura). El número del que ahora escribo es el 41... ¡Excelente! Un buen alimento para el cerebro. Nomás pa'que se den un quemón. Jeje




Pepe Quintero colaboró con Nos acusan de haber matado a Dios. Muuuuy bueeeeno.



Pero... ¿cómo tachar de asesinos a quienes fuimos creados para ello? ¿no es un matón tan sólo el arma que el propio dios empuña para cometer suicidio?



primero nos dejó volvernos Locos. Luego nos orilló a buscar respuestas a la vida incluso en los manicomios. Para después presentarse ante nos. condenando la demencia y provocándonos con su cordura



Más... ¿no fue acaso el Altísimo quien nos enseñó a alimentarnos de corazón y luego se arrojó a nuestro corral simulando que caía? ¿Y por qué quiso morir el Sempiterno? ¿Por qué no quiso estar màs el Omnipresente? Quizás porque lo enloquece la vergüenza de haber creado al animal más perfecto del reino de la locura


Rick Camacho realizó una adaptación de Morelia de Edgar Allan Poe






Mariano Grinberg adaptó La herencia de Matilde Arcángel de Juan Rulfo